El fin del mundo se declaró que sería el 21 de diciembre del año 2012.
Infinitud de profetas, visionarios, videntes, adivinos, múltiples apocalipsis, lluvia de meteoritos, tormentas solares, colapso tecnológico, pandemias, profecías mayas, inversión de polos magnéticos, muchas versiones y así sucesivamente.
Durante muchos años, muchas versiones del fin del mundo han estado dando vuelta.
En la historia universal del fin del mundo, en 2012 todos esos finales convivían en un mismo ecosistema.
Entonces, ¿qué carajo pasó?
El viernes 21 de diciembre del año 2012 en la isla del sol, Bolivia. A cuatro mil metros de altura sobre el nivel del mar, se celebraba el Pachakuti, que con estas palabras declaró: “cerrando el ciclo del no-tiempo y reviendo el nuevo ciclo; tiempo de equilibrio y armonía para la madre tierra”.
Hasta allá me fui. Si el final llegaba, que me encontrara en un lugar bien alto. En el camino construí una agencia documental. La intención era llegar, mirar y estar donde quería estar.
Todo apareció escrito después.
El fin del mundo se declaró que sería el 21 de diciembre del año 2012.
Infinitud de profetas, visionarios, videntes, adivinos, múltiples apocalipsis, lluvia de meteoritos, tormentas solares, colapso tecnológico, pandemias, profecías mayas, inversión de polos magnéticos, muchas versiones y así sucesivamente.
Durante muchos años, muchas versiones del fin del mundo han estado dando vuelta.
En la historia universal del fin del mundo, en 2012 todos esos finales convivían en un mismo ecosistema.
Entonces, ¿qué carajo pasó?
El viernes 21 de diciembre del año 2012 en la isla del sol, Bolivia. A cuatro mil metros de altura sobre el nivel del mar, se celebraba el Pachakuti, que con estas palabras declaró: “cerrando el ciclo del no-tiempo y reviendo el nuevo ciclo; tiempo de equilibrio y armonía para la madre tierra”.
Hasta allá me fui. Si el final llegaba, que me encontrara en un lugar bien alto. En el camino construí una agencia documental. La intención era llegar, mirar y estar donde quería estar.
Todo apareció escrito después.